LA TELEVISIÓN Y LA AÑORANZA...

Tengo que reconocer que cada vez que veo un partido de ACB me entra una añoranza tremenda de lo que significa estar sentado en el banquillo de un equipo profesional, aunque también es verdad que seguramente sea más un gorila, porque es mucho más grande que un mono, de entrenar, que simplemente trabajar con profesionales de lo que ha sido tu modus vivendi durante muchos años. 

Anoche veía con interés el partido entre el Caja Laboral y el Real Madrid y se cruzaban por mi cabeza un montón de imágenes y recuerdos que son muy difíciles de olvidar aunque pongas interés en pasar página. 

Según la Wikipedia, que debe estar muy enterada, yo he dirigido 88 partidos en ACB al CB Murcia con 31 victorias, que es un 35% de triunfos que solo han alcanzado José María Oleart con 41 victorias en 115 (35%) y Manolo Hussein con 35 en 100 encuentros que no puede ser un 35% más exacto. Hay algún técnico que su porcentaje es mayor pero nunca en más de 10 partidos en esta competición y en esta relación tampoco está Oscar Quintana, pues es el vigente entrenador y sus números rompen todas las estadísticas con 9 victorias en 16 partidos que  es un fantástico 56% en victorias.Debo tener muchas anécdotas que contar en más 100 partidos, para pasar esa cifra tengo que sumar los entrenados y dirigidos a mi Náutico de Tenerife en las temporadas 80/81 y 81/82 cuando se conocía a la ACB por Primera División, pero como dice aquel tópico del deporte, lo que pasa dentro de una cancha se arregla dentro de la cancha.

Podría relatar un sinfín de anécdotas vividas en partidos de alto nivel, muchas buenas y algunas malas que si no sería muy aburrido, pero viendo este partido del Caja Laboral me acordaba de mis luchas con los árbitros ACB de entonces por que los entrenadores rivales, en este caso el de Ivanovic, respetarán las líneas del campo y no se metieran dentro de la cancha de juego. Lo cuento por la gracia que me hizo el marcaje lateral de Martín Bertrán al bueno de Dusko durante buena parte de la segunda parte en la que no paró de cruzarse con él cada vez que intentaba meterse en la pista de juego. Digo que me hizo gracia porque seguramente el mismo árbitro, uno de los mejores de la liga sin duda alguna, me señaló muchas faltas técnicas durante mi carrera profesional y algunas de ellas seguramente por protestar ese detalle del entrenador contrario y su relevancia en el juego estando dentro de la pista de juego. Seguramente en aquella época, hace unos años, estaba peor visto que protestaras este tipo de actitudes del contrario que el estar metido dentro de la pista durante el 85% del encuentro, hoy ese detalle sigue siendo bastante permisivo pero algunos, tipo Moncho Fernández hace dos temporadas en Murcia por ejemplo, siguen pagando un peaje muy diferente llamándote de una manera u otra.

Viendo el excelente encuentro de mi paisano Sergio Rodríguez, hacía mucho tiempo que no lo veía jugar con ese descaro, me vino a la memoria mi último sector, cuando se jugaban sectores, con el CB Murcia Junior en Valencia en el partido que nos enfrentó al Estudiantes con Sergio Rodríguez y Carlos Suárez de figuras estelares.Corría la temporada 2003/2004 y yo había empezado esa temporada en ACB con un equipo que jugaba muy bien y que por razones muy extrañas entró en barrena pasadas las navidades. Al dejar el equipo ACB me encargué del equipo junior al que había renunciado su entrenador unas jornadas antes y me acuerdo muy bien que no pudimos competir en Valencia frente a aquel fantástico Estudientes ni contra el Pamesa, ambos los perdimos de forma clara, ni tampoco contra el CP La Roda, creo que era el campeón castellano manchego, al que ganamos de forma cómoda, por no poder contar con nuestros dos mejores jugadores de entonces. Un base uruguayo con padre español, Mario Trasante, y un ala pívot bielorruso que ya llevaba mucho tiempo con nostros, Iván Zholnerovich, porque en aquella época no podían jugar extranjeros estos campeonatos, como se ve este tema ha cambiado muy mucho y ahora juega hasta el pito del sereno aunque sea pakistaní. 

 Pues como os contaba, en aquel partido frente a un Estudiantes tremendo, perdimos de forma escandalosa al final pero les ganábamos de uno al final del primer cuarto con un sorprendente 24 a 25 gracias al tremendo acierto de nuestro tiro exterior. Aquel campeonato junior de la temporada 2003/2004 era para jugadores nacidos en 1986 y 1987, esas dos figuras son del 86, y nosotros aquel campeonato y aquellos partidos los jugamos con dos bases del 88, Chema Bernabé y mi hijo Juanjo, sin duda un gran recuerdo y una gran experiencia para ellos y para el resto del equipo.

También me resultaron curiosos los últimos tiempos muertos del partido, tanto los de uno como los del otro, curioso es seguramente un adjetivo muy simple para como se podría catalogar alguno de esos tiempos muertos vistos y oídos por decirlo de alguna manera, pero yo seguramente no sea la persona más adecuada para hacer sangre con respecto a ese tema y más sabiendo que todos los entrenadores tenemos días mejores y días peores. Me resulta muy interesante ver entrenadores extranjeros, como es el caso de Dusko Ivanovic por ejemplo, hablando en español el 100% de esos tiempos muertos aunque no haya ni un solo jugador español entre los van a jugar ene se momento, mientras veo a entrenadores españoles de prestigio hablando en inglés incluso si los que tienen que jugar son mayoría castellano parlantes. No se muy bien si quieren aprovechar los cursos de inglés a los que han asistido o simplemente es un canto a su ego de cara a la televisión, que seguro que queda muy bien.

Otro tema muy recurrente en estos momentos finales de la competición es el estado físico en el que llegan algunos equipos a estos trances tan importantes de la liga. Un ejemplo, independientemente de lo que pueda pasar en el cuarto partido o en el hipotético quinto encuentro de semifinales, es el caso del Real Madrid, un equipo que apostó desde el principio por el ritmo y por jugar en contrataque y transición rápida con un equipo lleno de excelentes jugadores para jugar de esa manera y con dos directores de juego muy adecuados para esa filosofía. El problema parece que ahora, finales de mayo, a ese equipo le falta gasolina y chispa para competir a su mejor nivel. Sergio Rodríguez, que jugado bien de forma intermitente durante la temporada, y NovicaVelickovic, que ha jugado muy poco durante la temporada, parecen los únicos preparados para rendir al 100% de sus posibilidades y jugadores como Jaycee Carroll, Martynas Pocius o el mismo Carlos Suárez no parecen estar pasando por su mejor momento. 

Ayer para poder jugar a ganar necesitaron jugar con los dos Sergios, Rodríguez y Llull, al mismo tiempo durante muchos minutos y cuando llegó el momento de la verdad por las faltas y eliminaciones de los grandes blancos, Pablo Laso aparentemente se olvidó de jugar con Felipe Reyes y terminó jugando con Velickovic, que había estado algún tiempo sentado, y Carlos Suárez de cuatro como pareja de interiores abiertos, por llamarlos de alguna manera, aunque está muy claro que él conoce a su equipo mucho mejor que yo. Lo más llamativo de este asunto es que el Real Madrid casi duplicó el número de rebotes de los vascos, 48 por 26, en un partido que terminó en una prórroga donde su juego todavía quedó más en evidencia, por culpa de esos tiempos muertos de los que escribía hace un rato, ante el final espectacular del Basconia.

Hoy 30 de mayo es el día de Canarias y yo siempre las tengo en mi recuerdo. Mi isla, mi gente, mis amigos, mis tenderetes de joven, mi Náutico, mi baloncesto, mis estudios, mis padres que ya no están y mis hermanos que si que están...este es mi pequeño homenaje a mis ancestros en las voces de Los Sabandeños, con su Llamarme Guanche.