viernes, septiembre 03, 2010

PASO A PASO

Recuerdo con cariño, y muchos de los jugadores a los que he entrenado pueden certificarlo, que en mis últimas temporadas en el baloncesto profesional siempre tenía la máxima de ir partido a partido, intentar no ver más allá del siguiente compromiso. Eso lo hacía muchas veces como forma de incentivar a mis jugadores y marcarnos nuevos retos una vez que conseguíamos una victoria. Creo que todos entendemos que ir partido a partido no significa que no tengamos una planificación que seguir con cierto rigor, las planificaciones están para llevarlas a cabo y para cambiar los detalles que creamos oportunos en el momento más adecuado, ni más ni menos. Gracias a esa coletilla de partido a partido hace unas temporadas conseguimos el récord de victorias en liga Leb con 14 victorias consecutivas y luego, además, nos regaló un ascenso a la ACB. Ahora no me apunto a caballo ganador, entre otras cosas porque todavía no hemos ganado nada, pero quiero mirar al futuro más próximo con ilusión y optimismo.

España se ha encontrado con un regalo con el que pocos contaban. Nueva Zelanda no solo ganó a Francia con cierta holgura, 82 a 70, sino que además le endosó un 22 a 5 en el segundo cuarto que dejó el partido sentenciado. Kirk Penney, un escolta de 1,95 y 29 años que no se aclimató demasiado bien a la temperatura de Las Palmas cuando jugó en el Gran Canaria en ACB, volvió a ser el estilete ofensivo que marca diferencias y terminó con 25 puntos, junto a él debemos dar las gracias al buen partido de jugadores como Vukona, Cameron y Abercrombie, ellos hicieron lo que no puedieron los nuestros en la primera jornada de este mundial, superar el atleticismo de los galos a fuerza de intensidad y coraje.

Ahora y gracias a este resultado, terminamos 2º en este grupo, por detrás de Lituania, y nos cruzamos el sábado, día 4, con Grecia, que perdió con Rusia por un apretado 69 a 73 y que no pudo remontar el excelente tercer cuarto de los rusos, 13 a 29, que prácticamente decidió un partido que estaba muy igualado. Los rusos controlaron bastante bien a los dos artilleros, hasta ayer, de los griegos, Spanoulis y Bourousis, que sumaron 13 puntos entre los dos y solo el intenso "Baby Shaq" Schortsanitis les hizo daño cerca del aro, terminó con 16 puntos y 9 rebotes. Lo que hicieron los rusos me importa poco pues con quien vamos a jugar es con Grecia y como no pienso comentar nada más de lo que pueda suceder en el hipotético caso de victoria sobre los helenos. Solo decir que los rusos no contaron una vez más con Khryapa, sigue siendo baja por lesión, y solo Mozgov, 18 puntos, y Vorontsevich, 10 puntos, anotaron con doble dígito, el resto de la anotación se repartió entre casi todos sus hombres y destacando negativamente, por su poca aportación, los 6 puntos de Monya en 17 minutos de juego. Ahora los rusos son el problema de Nueva Zelanda, el próximo lunes, que arrebató el tercer puesto a Francia, condenada a jugar el domingo frente a los locales de Turquía que terminaron primeros de su grupo.

Como decía antes y haciéndome eco de todo e
so que llevamos oyendo desde que empezamos este campeonato cuando se perdió con Francia, lo bueno empieza ahora. Y espero que sea realmente lo bueno, ahora no hay tiempo para declaraciones con palabras bonitas y con gaitas meloneras, ahora solo es tiempo de ganar, de apretar los dientes y de fijar la mente en el equipo griego. Es el momento de dejar a un lado los momentos de histrionismo personal de algunos, de poner por delante al grupo antes que el ego y dejar que las cosas fluyan adecuadamente. Centrarnos en hacer una defensa de equipo del nivel que merece nuestro baloncesto y nuestros entrenadores, los que enseñan en esas destartaladas canchas de la España más profunda, intentar hacer las cosas como hay que hacerlas, pasar los bloqueos por encima con determinación u orientar hacia el lado adecuado, para eso está ese supergrupo de técnicos que llevamos. Llegar a las ayudas, no solo a la primera, con intención de defender y tejer la red adecuada para que los griegos no esté a gusto. Que realmente nuestra defensa sea nuestra gasolina super para lo que nos queda por jugar.
Creo que es imprescindible que
Ricky se sienta cómodo jugando, que Juan Carlos Navarro , Rudy Fernández y Marc Gasol sean ellos mismos y aporten su calidad y experiencia y que las rotaciones tengan solo sentido común, solo eso, sentido común. Dejarnos de unidades, ya hemos visto lo que nos ha pasado y tropezar tres veces en la misma piedra no es cosa de personas con cierta preparación. Dejar fluir el talento de los nuestros es imprescindible, necesitamos la mejor versión de todos y cada uno de ellos, para sumar una victoria y encorsetarlos en un sinfín de jugadas que los rivales tienen muy estudiadas es llevarnos, otra vez, a la precipitación y a las pérdidas, otro de nuestros lastres hasta el momento. Aunque parezca un contrasentido, el dejar jugar no supone que hagamos las cosas sin sentido, lo que es importante es sentirse bien en la cancha y hacer las cosas con el corazon, con la cabeza y con otra cosa que también empieza con "co", lo que no se muy bien en que orden. Ojalá la próxima entrada sobre el Mundial sea para hablar de otro posible partido.


Se me ocurre una canción preciosa para terminar esta entrada. Digo que es preciosa porque no creo que muchos poemas se hayan cantado de la manera que se cantó esta maravilla de Antonio Machado. Cantares de Joan Manuel Serrat, que es quien pone la voz para esta canción que es mucho más que eso, mucho más que un poema y mucho más que una declaración de intenciones. Disfrutarla.

No hay comentarios: