martes, noviembre 29, 2011

OTOÑO GRIS POR DELANTE

Una vez instaurados en la fría dependencia del otoño parece que el color gris con el que nos levantamos cada mañana ayuda poco a subir el ánimo decaído por tanto tiempo de desesperanza y apatía colectiva ante ese mal rollo generalizado que nos ha tocado vivir. Aunque ahora cuando escribo la entrada el sol sea radiante y el color gris esté más escondido, igual que cuando algunos hablan de la universalidad de las cosas, de la crisis por ejemplo, y a mi me da lo mismo que esto sea a nivel universal mundial o europeo, siempre me dijeron que mal de muchos consuelo de tontos, lo que quiero y deseo es que cada día que ponga la radio, lea el periódico o vea la tele no hablen siempre de lo mismo, que los desahucios no empiecen las noticias, que el paro sigue y sigue creciendo, que la gente protesta con razones y que encima algunos políticos de esos que votamos casi todos se vean imputados en casos de corruptelas gigantes como la de los frescos de los bancarios que no solo se retiran en malos tiempos sino que además se llevan las sacas llenas para pasar calentitos lo que les queda por delante.

Con la que está cayendo cada día se me hace más difícil ponerme delante del ordenador en los ratos que tengo libre y dedicarme a contar lo que veo, es curioso que solo consigo desconectar de toda esa mierda en el momento en que me pongo a sudar como un pollo de esos que a los pobrecitos llaman mareados, corriendo, pedaleando o con un chándal y silbato incorporado en una pista de baloncesto, desde luego creo que me lo tengo que hacer mirar pues el efecto placebo del prozac empieza a minar otras partes importantes de mi cuerpo, igual debo volver a la tradicional aspirina de Bayer. Hace algunos años uno de mis grupos preferidos de los ochenta, Burning, aquellos del mítico que hace una chica como tú en un sitio como éste, decían mueve tus caderas cuando toda vaya mal, la idea estaba claro que no era nada mala, pero es obvio que no es lo mismo verlo con 24 años que 30 años después, o al menos a mi me lo parece.

El baloncesto no puede estar alejado de todo esto, es imposible, y aunque algunos pretendan ponerse una venda o mirar hacia otro lado, la verdad es muy diferente. Los que tratamos de subsistir sin hacer daño o al menos con los mínimos estropicios colaterales, nos encontramos con un montón de cortapisas que nos hacen cada más problemático sacar adelante proyectos que de una manera u otra pueden ser interesantes para nuestros más jóvenes. Yo creo que no vale la pena entrar en detalles, todos y cada uno de los que leen esta bitácora tan personal saben muy bien de lo que hablo y las diferencias que nos vamos encontrando ya no solo cada temporada que pasa, sino cada semana que se nos viene encima sin soluciones o trapicheando, en el buen sentido de la palabra, para salir adelante y cumplir ciertos objetivos. Otros en cambio viven por encima de todo esto que relato sin darse cuenta que ellos también son cómplices de alguna manera de estar como estamos.

Todo esto incide en detalles tan nimios, para algunos evidentemente, de como se repartían la tarta de dividendos de la NBA entre los propietarios de las franquicias, los que pagan, y los jugadores, los que juegan y cobran además por ello. Desde la distancia da un poco de grima viendo como unos y otros llevan semanas y meses despellejándose vivos para intentar llegar a un acuerdo en el que todos sean un poco más ricos. A nosotros nos implica, como aficionados y seguidores de la mejor liga del mundo, yo cada vez menos, lo que ahora será una desbandada generalizada de un montón de jugadores que tras unas semanas en Europa habían vuelto a tener ese protagonismo que tenían antes de ir a hacer las Américas. Hoy leo que Portland, por ejemplo, prohíbe jugar a Nicolás "Batman" Batum con el SLUC Nancy en Bilbao en el partido de mañana de Euroliga. Serge Ibaka ya ha confirmado que jugará el próximo partido del Real Madrid en Madrid frente al Valencia y donde coincidirá con la despedida de Tiago Splitter, que por cierto se pudo haber esperado en su casa y no haber venido a Murcia. Como ellos el resto hará los mismo o casi lo mismo, rumores hablan de que Rudy Fernández podría presentarse en Dallas y entonces decidir cual será su futuro, incluso se habla de que podría volver a los pocos días, una vez que sepa el papel que cumplimentará con los actuales campeones de la NBA. El contrato que tiene en Madrid y las condiciones en Dallas serían capaces de doblegar a los instintos más deportivos que existan por jugar en la NBA.

En Murcia la semana ha empezado con más ánimo, al baloncestista me refiero, después de la victoria del Ucam Murcia en Valladolid. Sin duda una buena noticia después de ver el excelente partido del Obradoiro en Santiago frente al FC Barcelona al que tuvo contra las cuerdas en muchos minutos del encuentro, 83 a 89 al final gracias a la inspiración de un fenomenal Juan Carlos Navarro. El que piense que el partido del próximo domingo en el Palacio será un partido cómodo creo que se equivoca, solo hace falta mirar los resultados de los gallegos cada vez que juegan a domicilio.
El equipo de Moncho Fernández está jugando un buen baloncesto y tiene bastantes argumentos para poner complicaciones a cualquiera, tiene buenos y expertos exteriores como Milt Palacio, el nigeriano Ebi Ere, Deron Washington, Alberto Corbacho o el propio Andrés Rodríguez y veteranos y fornidos interiores para dar la batalla como pueden ser Oriol Junyent, Lasme, Kendall y el veteranísimo Bernard Hopkins. Sin menospreciar a unos u otros me parece que en líneas generales el equipo de Murcia tiene más argumentos que los de Santiago, pero eso, claro está, hay que demostrarlo en la pista.
Por lo que se lee en los medios locales el Ucam Murcia hará un esfuerzo para intentar llevar más gente al Palacio de Deportes y ha sacado un abono especial para los próximos cuatro partidos en casa donde jugarán, además del Obradoiro, el Caja Laboral, el Estudiantes y el Real Madrid por solo 60 euros, que desde luego es un precio más que interesante.

Un poco de música para terminar esta entrada rápida en la que, como casi siempre, reflejo más mi estado de ánimo que otra cosa. El toque del baloncesto de acompañamiento sigue siendo el hilo de donde agarrarse para los aficionados que siguen esta bitácora. Hoy se cumplen 10 años que desapareció el más serio e introvertido de los Beatles, George Harrison. Para los más jóvenes decir que Harrison era guitarra de aquel grupo y que algunas de sus canciones han quedado para siempre, esta es una de ellas, My Sweet Lord. Una auténtica maravilla.

1 comentario:

Unknown dijo...

Me gusta leer tu blog Felipe, es diferente y muy interesante, hablas de basket y te preocupas de hablar de la cantera murciana, ojala se extienda el ejemplo.
El baloncesto lo animamos entre todos, hablando de baloncesto, jugando, entrenando, con la que está cayendo no queda otra si queremos que nuestra deporte favorito no retroceda.
Algunos nos empeñamos en hacer cosas diferentes, creo que a acciones como traer a Murcia a Antoni Daimiel le dicen labor de sensibilización o dinamización o al menos eso se espera que sea, si el baloncesto lo cuidamos entre todos y todos los que lo disfrutamos tenemos el objetivo común de que se hable ba-lon-ces-to, apoyando cualquier accion relacionada, creo que progresaremos muy positivamente.
Buen basket y un abrazo Felipe