Día gris el de ayer, preámbulo de lluvias para hoy o eso al menos decían las predicciones que viendo como ha amanecido no se han equivocado, ya tenemos instaurada la tiranía del otoño o eso al menos es lo que parece. Yo sigo tratando de tirar hacia delante y expectante ante las situaciones que se van presentando, sin rendirme y con ganas de luchar y pelear. Es lo que he hecho durante muchos años y es lo que voy a seguir haciendo, sin entregarme y sin esconderme. Parece que cuando una habla o escribe, como yo en muchos casos porque me preguntan o simplemente porque me apetece, tendría que guardar cierta compostura en los comentarios o en las opiniones. Yo también creo que normalmente debería ser así, siempre y cuando la verdad vaya por delante y no faltes al respeto, eso también lo tengo claro.
Ayer al mediodía, participé en dos emisoras de radio diferente para hablar de baloncesto y del partido del domingo. Creo que la opinión sobre el arbitraje del domingo frente al Valencia es bastante unánime, la actuación de los colegiados condicionó el resultado en muchos momentos del partido y aunque no se puede decir que ellos fueron los que decidieron el encuentro, ellos no perdieron balones importantes ni fallaron tiros libres o contrataques más o menos fáciles, si que consiguieron que el Valencia no terminase de irse nunca del partido y eso lo digo desde la máxima objetividad posible. Como dije en la Cope primero, con Vicente Luis Cánovas, y luego en la Cadena Ser con Javier Orive y José Antonio Vera, si antes, cuando entrenaba en esa liga no solía callarme cuando seguramente no era muy objetivo por motivos obvios, ahora que veo las cosas con mucha más tranquilidad y con casi absoluta objetividad opino con libertad y el arbitraje me pareció sibilino, si por sibilino se entiende como oscuro y misterioso, para el Ucam Murcia desde que el partido empezó hasta que terminó la prórroga y en ese partido se jugó un tiempo extra y una posesión podía decidir un partido.
El Ucam Murcia, sus gestores y sus directivos, han movido ficha y han anunciado el fichaje de Matt Walsh, un exterior que puede jugar de escolta o alero y que hace unas temporadas jugó en Manresa 2007/2008, donde por cierto no terminó la temporada, y que ahora estaba jugando en Francia con el Asvel Villeurbanne donde compartía vestuario con Tony Parker. Matt Walsh es un "casi" 2 metros, blanco formado en la universidad de Florida con una corta experiencia de una temporada en la NBA con Miami Heat y experiencia en Grecia, España, Francia, Bélgica y Eslovenia, un auténtico trotamundos al que le queda muy poco para cumplir 29 años. Está claro que este jugador no se puede considerar una estrella pero es un exterior que desplazará, al menos temporalmente, a David Barlow a jugar más minutos de cuatro y ayudará a sumar en ese concepto de juego colectivo y de no dependencia de nadie en especial.
Además parece, según se comenta en los corrillos del baloncesto, que se busca un interior que supla temporalmente a Robert Kurz. Viendo el mercado de jugadores libres se me ha ocurrido un tapado. Lo malo es que no creo que sigan mi consejo, espero que no se lo tomen a mal sino todo lo contrario, de fichar a Pau Gasol, un cuatro de primerísima línea y que además no ocupa plaza de extranjero. Más ahora, que según parece el presidente del Barça ha dicho que no tiene dinero para ficharlo ni a él ni a su hermano Marc. No estaría mal fichar a los dos hermanos por un mes o por el tiempo que ellos quieran, que más da. El Palacio de Deportes estaría lleno en cada partido y creo que se sumarían unas cuantas victorias, de eso tampoco tengo la menor duda. Suena a imposible, seamos realistas, pero que bien se verían con las camisetas del CB Murcia.
Dragic ha vuelto a España para jugar en el Caja Laboral tras su regular experiencia en Murcia mientras dure la parada de la NBA. Otra figura de esa liga, Deron Williams, base estrella de la NBA, que firmó en el Besiktas turco y que en esta jornada de la Eurochallenge anotó 50 puntos en la victoria de su equipo.
Buena música para terminar esta entrada, música potente y que como muchas que se suman en esta bitácora no tienen tiempo definido. ZZ Top es un grupo estadounidense que hace rock sureño y hard rock, llevan desde 1969 en la carretera con la misma formación y esta canción, La Grange, suena igual de bien que en 1973 cuando salió el álbum donde estaba. Hay que ponerse las pilas.
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