ADIÓS Y BIENVENIDA

Ayer cuando subí la entrada pensaba seriamente que era la última del mes de enero del 2012, luego, al poco rato de subirla, me entero del cese de Luis Guil y me quedé un poco de piedra porque no esperaba esa noticia, ni mucho menos. Hoy martes que tenía bastante lío de trabajo me han llamado de dos emisoras diferentes para hablar del asunto y a una tercera, la de mi amigo Vicente Capapé, le tuve que decir que era imposible acercarme a una tertulia que hoy iban a hacer sobre la situación de nuestro Ucam Murcia. Creo que la implicación, honradez y profesionalidad de Luis Guil al frente del Ucam Murcia durante esta temporada y media no se merecía una salida tras un partido tan espantoso como el del domingo, creo que los jugadores han perdido una grandísima oportunidad de haber agradecido el interés de Luis en ficharlos y tenerlos en este equipo con su actitud frente al Barça, pero allá ellos. Los resultados al final son los que quitan y ponen a los entrenadores y el que piense lo contrario está equivocado.

Esto, lo de los resultados y los ceses, muchas veces es como un "déjà vu" en el que parece que vives una y otra vez la misma situación aunque pasen unos cuantos años. Es como el día de la marmota en Atrapado en el tiempo con Bill Murray y Andie Mac Dowell, siempre pasa lo mismo en el momento en que tiene que suceder algo diferente. Como diría el célebre Ruín de Archena en una de sus frases míticas en Vigo celebrando la Copa de Leb Bronce ...todo el partido pitando lo mismo, todo el partido pitando lo mismo... Seguro que no aciertan a quien le copió la frase. Pues lo mismo, esto parece que se repite una y otra vez.
A mi me ha tocado vivir esta situación muy parecida dos veces pues aunque hubo un tercer ascenso pero el desarrollo posterior fue muy diferente, ascender tras una temporada brillante en Leb, donde todo el mundo halagaba tu trabajo y el de tus jugadores, incluido el juego y la forma de entender el baloncesto, luego llegas a la ACB tratas de hacer un equipo lo más competitivo posible ajustándote a los presupuestos y tras unos titubeos y unos buenos resultados entras en barrena y todo el mundo sabe más que tú en ese momento, todos expresan su opinión y nadie se acuerda de lo que hiciste unos meses atrás. En mi caso, es la única diferencia, yo me sentía una parte más de un club que quería como mío y siempre di el paso de dejar al equipo buscando una solución y ahora con el paso del tiempo tengo que decir que me equivoqué, pues ninguno de los que vino conocía mejor al equipo que yo y solo necesitaba que alguien me dijera lo bueno que era y lo bien que lo podía hacer, quizás con ese apoyo todo hubiese sido muy diferente.

Ahora a Luis Guil, los resultados obligan a los que han sido sus amigos y soportes en estos meses a decirle que tienen que buscar otra opción, que es más fácil cambiar a uno que a seis o a siete, en fin lo que se dice siempre y se, de verdad que lo se, lo difícil que ha supuesto para Alejandro Gómez, como Director General del club, tomar una decisión como ésta. Estoy seguro de que Alejandro sabe muy bien la calidad y la capacidad de Luis Guil, pero ante los resultados él tiene que tomar un camino y ese camino es el que se toma habitualmente. Lo siento mucho por Luis al que aprecio por su trabajo, su trato y su profesionalidad, ojalá que le vaya muy bien.

Cuando empecé a escribir estas letras se rumoreaban muchos nombres, incluso algún valiente se atrevió a dar mi nombre como opción al relevo, pero hablando de cosas serias yo incluso me atreví a sugerir la opción, que me parecía interesante, de Quini García en una de las emisoras que empezó a dar una ristra de nombres en forma morcilla. Al final esta tarde se ha confirmado el fichaje que parecía más cercano de las opciones que se valoraban, Oscar Quintana será el nuevo entrenador y de él dependerá que este equipo esté la próxima temporada en ACB.

Una vez que está Luis Guil fuera del club este equipo necesitará un cambio radical pues seguir en la misma línea que se llevaba me parece un absoluto disparate al entrar un nuevo entrenador con una filosofía propia y unas ideas diferentes, pero yo tampoco estoy en posesión de la verdad y con esto quiero decir que haga lo que haga, lo más importante es arrimar el hombro para ayudar e intentar que el equipo salve la categoría y sigamos teniendo ACB en Murcia, eso es lo más importante.

Desde este momento, por ejemplo, la distribución de los roles en esta plantilla y la hipotética recuperación de Robert Kurz e Ime Udoka se me antojan como imprescindibles para poder afrontar la segunda vuelta con cierto criterio en la busca de la salvación, si estos dos no funcionan dándoles un papel estelar hay que ir a por otros, eso también lo tengo muy claro, aunque la opinión de Oscar Quintana será la que se tome en consideración desde este momento y no la mía que no paso de ser un aficionado más con cierta experiencia. El calendario, los próximos partidos y sobretodo los resultados marcará el devenir del futuro del equipo.

Oscar es un entrenador con personalidad propia y con amplia experiencia al que además me une muy buena relación desde la temporada 97-98 en la que ascendimos de la Leb a la ACB, él con el Fuenlabrada de Perasovic y yo con el CB Murcia de Tony Smith y su excelente compañía. Después de su largo periplo en Fuenlabrada ha entrenado en Sevilla, Zaragoza, Manresa y Alicante, con lo que nadie puede hablar de falta de experiencia.

Es un entrenador que tiene carácter y que puede enfrentarse a esta situación sabiendo muy bien lo que debe hacer, no se esconde frente a las injusticias y lo que debemos tener claro es que su suerte será la suerte de nuestro baloncesto.