UN PASO ATRAS.

Según el comentario del activísimo experto técnico del GTM Televisión nuestro temporero Taggart, o Gray como reza en la camiseta, era muy parecido al "All-around player" que jugó en Cleveland y ahora lo hace en Miami, Lebron James. Los tatuajes hacen milagros pues el pobre Taggart, que no jugó un mal partido ni mucho menos, pues sus compañeros también debieron pensar lo mismo que el "entendido" de siempre y le dieron el último balón de la noche para que buscara el empate. Taggart entró por el fondo sobre su derecha y se encontró con la cadera de Jorge García, posible falta o no, y el balón se perdió para que un justito, muy justito diría yo, Baloncesto León ganara su sexto partido consecutivo y el CB Murcia del 25 aniversario sumara su segunda derrota en casa en tan solo seis jornadas jugadas.

León ni siquiera anotó 70 puntos, se quedaron en 69, pero su apretón del último cuarto les valió para llevarse una victoria en la que ni siquiera necesitaron que Juanjo Bernabé jugara un poquito, -2 de valoración con 0 de 5 en tiros de campo y 4 balones perdidos, uno de ellos que casi regala la victoria a los de casa a falta de pocos segundos sacando de fondo y ganando su equipo por un punto. Solo Jorge García y Manny Quezada anotaron algunos puntos importantes en momentos delicados y la seguridad de Seawright junto a Fontet, fueron suficientes para doblegar a un equipo que usó a sus 11 hombres, demasiados para mi gusto, y en el que el mejor es el "guerrero" Coppenrath que parece más tocado, físicamente claro está, a cada partido que pasa. Esta competición no es ACB, es Leb y hay que jugar bien y, sobretodo, para ganar, siempre. Si llegas a un final justo y apretado, puede ganar cualquiera, como en las victorias de Orense y Málaga, pero también puedes perder como el día del Breogan o el día de hoy con León. Entre los 3 bases locales sumaron 4 puntos, los mismos que anotó el 2º base leonés, Jorge Calvo, que jugó algo más de 12 minutos. Otro detalle importante es que si un equipo con Jorge García jugando de "4" con más de 34 minutos en la cancha, atrapa más de 14 rebotes que sus rivales, es fácil llegar al final con opciones, aunque seas inferior a nivel de nombres.

Por cierto, Franco Rocchia, que sumó muchas cosas en el partido y no solo puntos, tiene pasaporte italiano pero es argentino y lleva muchos años en León, hoy creía por un momento que le iban a pedir una pizza desde el puesto de comentarista televisivo. La explicación técnica del triple solo en la esquina de la derecha de los leoneses en la recta final fue espectacular, la defensa del Murcia estaba muy cerrada y permitía solo esos tiros, al mismo tiempo se ve la repetición y se ve como León trata de defender los tiros exteriores con diferentes ayudas hasta que un pase extra más deja liberado al tirador de la esquina. Pero está claro que la culpa de la derrota, ni mucho menos, no la tiene ni por asomo la retrasmisión televisiva dela GTM, excelente de calidad en imagen y detalles. La responsabilidad de la 2ª derrota estaba en la pista y en los actores principales y secundarios de la película.

Es muy pronto, está claro, pero estas derrotas pueden ser importantes si se quiere terminar primero y eludir el cara o cruz del playoff. Al final 67 a 69, el mejor por locales, junto a Coppenrath, fue el temporero Lebron, perdón Taggart, que en 20 minutos anotó 14 puntos, metió dos triples y colocó dos tapones, aunque su aportación reboteadora fue escasa. Jasen derrochó intensidad y el puesto de escolta repartido entre Umeh, -5 de valoración y 4 puntos, y Robles, 5 puntos y 3 de valoración, pinta solo regular teniendo en cuenta la calidad de ambos jugadores, auténticos lujos para esta liga.

Está claro que los partidos en la televisión no se ven igual que en la propia pista, pero a mi, al menos, no me dió ninguna impresión que los árbitros tuvieran que ver nada con el resultado final. Había gente en la grada que había vuelto al Palacio tras las dos victorias a domicilio del CB Murcia, pero aunque algunos, sorprendentemente, digan que el equipo lo hizo casi todo bien, creo que la impresión dejada el viernes por la noche no fue muy buena.