REFLEXION PREVIA TRAS UN FIASCO

Cuando solo han paso unas horas desde la debacle del partido de ayer frente a Francia y antes de que se juegue el segundo frente a Nueva Zelanda, se me ocurre comentar algo más de la derrota que anoche estremeció a muchos aficionados al baloncesto en España. En mi entrada de ayer y por encima, ya dije lo que me pareció el fiasco del partido frente a Francia. Los galos vinieron a este Mundial de Turquía con bajas considerables que todos conocíamos, Tony Parker, Mickael Pietrus y Joaquim Noah son tres jugadores que en la actual Nba ocupan puestos importantes en sus respectivos equipos y que si los ponemos en una balanza con nuestras dos bajas, Pau Gasol y Calderón, estaríamos muy igualados en relación de importancia, aunque Parker es tan estrella como lo puede ser nuestro número uno, Pau Gasol.

Viendo el partido está claro que Collet, seleccionador francés, ha conseguido repartir las cartas con acierto y cada uno, incluidos sus estrellas Diaw y Batum, saben muy bien cual es el papel asignado para esta cita. Ni siquiera notaron el mal partido de Nando de Colo pues Andrew Albicy, un base nacido en 1990 y por debajo del 1,80, superó a nuestros bases en los momentos más importantes del partido. Sus pívots, Koffi, Traore y el Nba Mahinmi, no solo contuvieron a nuestros grandes cerca del aro gracias a su atleticismo sino que además aprovecharon casi todo el petroleo que originó Diaw con sus penetraciones que siempre necesitaron de la ayuda del grande turno. En este sentido no entiendo muy bien que hacían nuestros pívots, todos, persiguiendo por fuera de la zona a cualquiera de los citados anteriormente cuando ponían bloqueos directos a sus exteriores. En todo el partido solo recuerdo una canasta desde el tiro libre de Koffi y otra de Traore abierto a cuatro metros en el fondo.

Nuestra defensa trató de taponar los posibles puntos de Batum y Diaw, pero se olvidaron de calibrar la posible aportación del mismo Gelabale que esta temporada fue rechazado por los servicios médicos del Alicante. Gelabale se pareció al que jugó en Madrid antes de ir a la Nba y romperse, superó a todos sus defensores y tiró con buenos porcentajes, además de controlar y sacar del partido a un desquiciado Rudy Fernández que anotó tres tiros de los 10 que tiró, alguno de ellos muy fuera de sitio y momento. De todas formas creo que el alero mallorquín al menos lo intentó y trató de poner muchas cosas en el juego, el problemas es que la mayoría de ellas fueran fuera de control y con muy poca fortuna.

Sanemeterio no jugó ni un minuto cuando el equipo no lograba anotación fiable de nadie y el juego de Mumbrú y Garbajosa se asemejó más al que han hecho esta temporada que al que se esperaba tras la preparación mundialista. Ahora les toca a todos, empezar a ver el baloncesto tal y como es, sin el condicionante de tener un arbitraje que les hace sentirse bien y cómodos, igual que en su preparación del Europeo del año pasado. Les toca pensar que Sergio Llull los puede ayudar desde la posición de base, pues Raúl ni está bien, solo lleva una semana con el equipo, ni es el jugador que ahora mismo necesita este equipo.

Esta noche se juega con Nueva Zelanda que ayer perdió con Lituania tras encajar un 20 a 2 en el inicio del 2º cuarto y que dejó el partido de cara para los lituanos que terminaron ganando por un claro 92 a 79. Kirk Penney, que jugó en Las Palmas con el Gran Canaria y que también hizo sus pinitos en la Nba con los Heat y con los Clippers, es un escolta con gran capacidad de anotación, 37 puntos ayer, pero se me antoja que tienen pocos argumentos para ganar a España, aunque los nuestros no estén en su mejor momento.

Yo creo que este grupo se ha hecho merecedor de la confianza de los aficionados al baloncesto en España y hasta que no se demuestre lo contrario, más derrotas como la de ayer, todos debemos pensar que ellos son capaces de reconducir este situación. O eso al menos espero.