COPA, JUGADORES Y SELECCION (1ª PARTE)

La Copa del Rey ACB siempre es un buen escaparate para muchos jugadores. En esta edición de Bilbao, además de excelentes jugadores extranjeros y comunitarios, había un nutrido grupo de jugadores que fuerzan la máquina al 100% para poder llegar a completar ese grupo que debe defender el título mundial conseguido en Japón y que éste verano se jugará en Turquía.

Creo que los ocho equipos que se dieron cita en la capital bilbaína podían aportar, como mínimo, algún jugador a ese grupo que en su día seleccionará Sergio Scariolo atendiendo no solo a nuestra competición nacional, sino a la que se sumará los jugadores que tenemos en la NBA o jugando fuera del país, como son los casos de sus dos bases en el Khimki.
He hecho un pequeño resumen de los 15 jugadores nacionales que he visto en Bilbao con más posibilidades, bajo mi criterio evidentemente, de terminar en esa lista, blanca o negra, de 16 o 17 jugadores que conformarán el primer grupo de jugadores definitivos. Hay alguno que evidentemente no tiene casi ninguna posibilidad de estar en ese último prelistado, pero sin duda ahora mismo deben estar en la libreta del entrenador italiano. En ésta primera entrada van los ocho primeros que no jugaron la final.

Empezando por los primeros eliminados en cuartos de final, Bilbao, Estudiantes, Cajasol y Joventut, se me ocurren un jugador por equipo y precisamente en solo dos posiciones, alero alto y pívot grande.
Alex Mumbrú del Bizkaia Bilbao es de los pocos aleros altos que ésta temporada tiene que jugar casi siempre con su equipo, en Europa y en la ACB, por la delicada situación deportiva por la que atraviesan los anfitriones de la Copa. Cumplirá 31 años en junio, con lo cual su edad no tiene porque ser un problema, y juega muchos minutos en su equipo, anotando puntos, 14.4 de media, y con buena valoración. Ayudó a ganar la plata de Pekín y el oro europeo de Polonia, por lo que su aportación en estos casos ya está de sobra valorada para poder hacer comparaciones.

Carlos Suarez del Asefa Estudiantes, podría ser otra opción a ese puesto de alero alto que parece no tener un dueño muy definido. Carlos es un alero que está claramente por encima de los dos metros, cumplirá 24 años el próximo mes de mayo y es una de las referencias del Estudiantes de Luis Casimiro. Tiene una enorme envergadura de brazos y le gusta hacer daño cerca del aro, donde suele atraer a sus defensores más pequeños. Juega casi 30 minutos por partido, anota y ayuda en el rebote. Sus porcentajes en el tiro de tres son aceptables, por encima del 38%, y su juventud es otra alternativa a ese puesto de alero alto sin dueño.

En el DKV Joventut se podría hablar de algún joven como Pere Tomás, un joven alero que disfruta de muchos minutos pero que tiene muchas alternativas por delante.
Un valor más sólido hoy en la Penya es Eduardo Hernández Sonseca, un pívot de 2,12 que juega en la rotación verdinegra y que siempre se cae a última hora del equipo nacional definitivo. Es cierto que ahora mismo el nivel de los posibles hombres grandes para estar en la selección española está muy alto. Hdez-Sonseca tiene cuerpo y tiene calidad, incluso mano para tirar, aunque en su juego se muestran lagunas en forma de irregularidad que son manifiestas. Cumple 27 años en junio y parece que sus opciones de equipo nacional son ahora o nunca.

En el difícil entramado de nacionalidades que es el Cajasol, solo Juanjo Triguero tiene el perfil necesario para poder ayudar en la preparación de los hombres grandes españoles. Triguero no es grande, es enorme y además cuenta con la confianza de Joan Plaza en un equipo donde su altura y sus kilos ayudan mucho en el aspecto defensivo. Juega minutos, 27 por partido, rebotea, pone tapones y las que le dan cerca sabe muy bien como terminarlas. Igual que en el caso anterior su mayor problema puede ser su falta de regularidad y la poca predisposición para tirar en distancias cortas, obligándolo siempre a ir hacia la canasta. Hace poco cumplió 26 años y parece haber madurado lo suficiente para nuevos retos.

De los eliminados en semifinales, Valencia y Caja Laboral, se me ocurren cuatro jugadores más. Curiosamente son todos exteriores y bastante polivalentes.
Victor Claver ya se puede considerar, a pesar de su juventud, un jugador válido para la selección absoluta. Es un alero alto muy alto, creo que está por encima de los 2,05, que puede jugar de tres o, incluso, puede jugar como cuatro por su estatura y su físico. En su equipo juega mucho y muchas veces defiende al cuatro del equipo contrario, aprovechan la versatilidad atlética de Pietrus para defender a los exteriores. Salta como pocos, pone tapones con facilidad, y cada vez pone mejor el balón en el suelo para crearse sus propios tiros. Debe mejorar su tiro exterior, irregular hasta el momento, y sus desplazamientos laterales para estar más agresivo con aleros más pequeños, pero recordar que solo tiene 21 años y mucho camino por recorrer.

El otro exterior del Valencia es, evidentemente, Rafa Martínez. El escolta catalán de 1,90 es un todo terreno en el amplio sentido de la palabra. Puede tirar, penetrar por ambos lados con facilidad, crearse sus propios tiros y defender muy agresivo. Su formación en el Manresa, un equipo más pequeño, lo ha obligado a mejorar en todos y cada uno de los aspectos de juego. En unos días cumple 28 años y está en el momento más caliente de su trayectoria, anota con facilidad y sus porcentajes en el tiro de tres, ésta temporada, son muy buenos. Una alternativa seria a ser relevo de Juan Carlos Navarro.

En el Caja Laboral hay un jugador que ahora mismo está en muchas quinielas por su momento. Hay que esperar hasta el final de la competición, pero está muy claro que Fernando San Emeterio es en la actualidad una apuesta de muchos. San Emeterio es un santanderino de casi dos metros, 1.99 según la ficha ACB, que puede jugar en los dos puestos exteriores con cierta facilidad. Ganarse el respeto y la confianza de su entrenador no es tarea fácil y él lo ha conseguido. 26 años y un recorrido que pasa primero por Valladolid y luego por Girona, para estar por encima de minutos y valoración de jugadores como Carl English o Brad Olesson. Su juego está muy definido a la derecha, su mano dominante, pero aún así es muy complicado pararlo en el 1x1 y más ahora, que no se le puede dejar espacios pues tira con acierto desde 6,25. Otra alternativa seria para la rotación exterior de Navarro y Rudy Fernández.

El último jugador de ésta entrada es otro exterior del Caja Laboral que alterna la posición de base con la de escolta, dependiendo de las necesidades de su equipo. Pau Ribas está formado en el Joventut y en unos días cumplirá 23 años, su físico y altura, 1.96, lo convierten en una gran esperanza para nuestro baloncesto. En el Caja Laboral su entrenador, Ivanovic, cuenta con él y está anotando canastas decisivas para su equipo en las últimas jornadas. Está claro que tiene que mejorar su tiro exterior, uno de los puntos menos fuertes de su juego, pero le sobra confianza en si mismo para lograrlo. Defiende, es agresivo y ve el baloncesto con claridad. El problema más grande para él, como para alguno más, es que además de Calderón y Ricky Rubio, hay muchos más bases españoles de gran nivel.
En unos días, con algo más de tiempo, pondré en orden los siete nombres restantes, cuatro del Barça y tres del Real Madrid. Se aceptan comentarios y apuestas sobre estos siete que faltan en esta relación y que jugaron en Bilbao.

Para despedir esta entrada en la que hablamos de baloncesto de nivel quisiera recordar a un hombre del baloncesto de Murcia. La semana pasada me enteré de la muerte de Francisco Fernández Torralba. Paco El Cartero, como lo llamaba la gente del baloncesto de la Región era un hombre bueno que amaba este juego y hacía lo imposible para que los chavales de Caravaca de la Cruz, su pueblo, pudiesen jugar y disfrutar del mismo. Lo conocí hace años en su pueblo y hablamos mucho de baloncesto, él seguía todos los partidos que ponían por la tele, entrenaba, dirigía y su pérdida, es sin duda alguna, una pérdida importante para nuestro baloncesto. Descanse en paz.