viernes, octubre 25, 2013

AYER Y HOY...

Con la llegada del Real Madrid a Murcia para jugar frente al UCAM, vuelven a la memoria de algunos las victorias, que en este romance del baloncesto en Murcia, desde la temporada 90/91 hasta ahora, se resumen a solo dos triunfos. 
Curiosamente en ambas situaciones mi relación fue muy directa con el que mi primero, era el Zumos Juver en esa temporada del estreno, la 90/91, no en vano yo era el entrenador en aquella victoria en el Pabellón Príncipe de Asturias un 25 de noviembre de 1990 ante más de 5.500 espectadores que se pegaron por ver aquel partido en aquel pabellón del estreno en ACB. 
La otra victoria de esta historia fue en la temporada 94/95 y además de ser la del estreno en el Palacio de Deportes, aquel equipo lo entrenaba José María Oleart y yo era el Director Deportivo del club que ya se llamaba CB Murcia y ganó ante 7.500 espectadores que llenó hasta la bandera esa instalación que hoy cuesta tanto ver ocupada en su totalidad.
En la 90/91 ganamos 77 a 74 al Real Madrid de Joe Llorente, Chechu Biriukov, Pep Cargol, Quique Villalobos, Fernando Romay, Antonio Martín, Carl Herrera y Stanley Roberts, estos dos últimos dos jugadores recién llegados de la NBA, a los que entrenaba el mítico Wayne Brabender
Aquel día ganamos con un excelente partido defensivo, dejamos al Madrid en solo 74 puntos, donde solo Antonio Martín con 28 puntos nos hizo mucho daño, y nosotros aprovechamos muy bien nuestros recursos con el buen partido del equipo en general y de Ralph McPherson, 22 puntos, Julio Torres, 18 puntos, y Jordi Soler, 11 puntos. 
En aquel partido, jugado entre semana, y como en la mayoría de victorias de aquella primera temporada en la ACB, que al final se me hizo demasiado larga, también jugaron muy bien Tom Gneiting, Jota Davalillo, Micky Abarca y Quique Azcón, que por cierto terminó siendo un excelente sexto hombre en aquella rotación. 
Con motivo del anuncio de Basket Lovers de Endesa con Quique Azcón, hace unas semanas volví a ver este partido y creo que con aquella defensa mixta que hicimos muchas veces esa temporada, "triángulo y dos" con tres hombres en zona y dos en individual, controlamos muy bien la anotación de sus exteriores y decidimos el partido en la recta final, sin duda uno de mis mejores recuerdos como entrenador profesional.
Está claro que el baloncesto ha cambiado en aspectos muy relevantes y aunque el juego sea el mismo, el aspecto físico está muy por encima de otros detalles que antes eran indispensables para marcar la diferencia. Hoy el talento sigue siendo clave, gracias a Dios, pero unirlo a cierto nivel físico, es imprescindible si se quiere jugar a cierto nivel.
Luego, en la temporada 94/95, en la temporada que se estrenaba el Palacio de Deportes y se llenaba jornada tras jornada, el equipo de José María Oleart estaba sustentado en una tripleta de extranjeros de máximo nivel, Michael Anderson, Johnny Rogers y Bobby Martin, que jugaron una excelente temporada. Junto a ellos estaban el escolta Edu Piñero, los aleros Quini García y José María Pedrera, más los jóvenes Xavi Sánchez Bernat y el ala pívot murciano Ramón Moya. En aquel equipo también estaba, aunque no jugó aquel día, el joven base catalán Maiol Cisteró. Aquella tarde del día de San José, un 19 de marzo de 1995, los hombres de Oleart que ganaron por la mínima, 90 a 89, se pusieron en mano de un fantástico Michael Anderson, 34 puntos más 9 rebotes y 4 asistencias para terminar con 38 de valoración, que junto a un gran Johnny Rogers, con 24 puntos y 30 de valoración, y un formidable Bobby Martin, 21 puntos y 12 rebotes, pudieron con Sabonis, Arlauckas, Cargol, Antonio Martín, Biriukov, Isma Santos, Antunez, Skeeter Henry y Jose Lasa, un equipazo en toda regla que dirigía, nada más y nada menos, Zeljko Obradovic.
Aquella fue una gran victoria en una gran temporada en la que además disfrutamos de un gran baloncesto con victorias frente a rivales como el TAU de Vitoria, al Pamesa primero en Murcia y luego en su pista, en Zaragoza, al FC Barcelona, el Unicaja de Málaga y muchas otras en una temporada en que se terminó con 18 victorias en liga regular con un lleno casi continuo en el Palacio de Deportes de Murcia.
De aquella temporada fantástica solo logramos retener a Bobby Martin un año más pues tanto Michael Anderson como Johnny Rogers, a los que intentamos renovar a toda costa, ficharon en otros proyectos con bastantes más recursos económicos que los nuestros. Recuerdo con mucho detalle como se confeccionó aquel equipo entre el entrenador, que creía ciegamente en Anderson, como nos salió la oportunidad para fichar a Rogers estando yo en Los Ángeles y como aposté, en primera persona, por un Bobby Martin desconocido en Europa al que había visto jugar en vivo y en directo en la CBA  con Quad City
El domingo a las 12,30 horas vendrá un Real Madrid que ahora mismo juega a un baloncesto de otro nivel, ayer, sin ir más lejos, pasó por encima del Brose Bamberg alemán en partido de la Euroliga por un apabullante 98 a 58, cuarenta de diferencia, que habla muy a las claras del nivel de los blancos a día de hoy. Bases de máximo nivel con Sergio Rodríguez, Sergio Llull y Dontaye Draper, aleros de gran capacidad anotadora con Rudy Fernández, Jaycee Carroll, Darden y el joven Dani Díez, más una batería de interiores y polivalentes de primer nivel con Mirotic, Felipe Reyes, Slaughter, Bourousis y Mejri. Desde fuera y como entrenador me parece un equipo de un nivel fantástico que además juega un baloncesto muy divertido y entretenido de ver para los aficionados al buen baloncesto.
Para tener opciones de ganarle a un equipo como este, no solo hay que jugar muy bien en ataque y bordar el juego ofensivo, seguramente lo más importante es conseguir que ellos no jueguen al rival que acostumbran tratando de ponerles los máximos problemas posibles en defensa. San Miguel debe jugar al nivel de la primera jornada frente al Fuenlabrada y Servera debe dar el descanso adecuado rindiendo a un excelente nivel defensivo y ayudando a sus compañeros a ser mejores. 
De la batería de aleros, tres deben aportar de forma regular o como mínimo dos deben estar muy bien y uno echar una mano en momentos puntuales, creo que entre los cuatro que hay, esto se podría cumplir con cierta normalidad ante el juego de los aleros blancos donde el control de Jaycee Carroll y Rudy Fernández se me antoja indispensable.
Ahora hay cuatro interiores para competir duros y agresivos y además deben saber usar los centímetros y la fuerza del quinto interior, Orupke, durante muchos minutos ante las dos torres blancas, el griego Bourousis y el tunecino Mejri. La defensa sobre Mirotic de José A. Antelo o Romhdane es importante y la lucha en el rebote de Tillie y de Lima con Felipe Reyes y Slaughter es indispensable pues por ahí se puede romper el hilo de la igualdad. Forzar el rebote ofensivo les debe crear problemas para poder correr en el contrataque y anotar fácil llegando. Si no se va a ese rebote hay que correr muy bien para atrás porque este Real Madrid es capaz de romper el partido en muy pocos minutos. 
El domingo saldremos de dudas, no por el resultado, de la capacidad de este Ucam Murcia para enfrentarse a los teóricos gallitos de nuestro baloncesto nacional.
Creo que esta entrada llena de recuerdos no puede tener mejor final que la música de los mejores de siempre, The Beatles, y su inolvidable Yesterday que muchos hemos cantado o tarareado en alguna ocasión. La buena música no es de ayer o de hoy, es de siempre.

No hay comentarios: