Hace unas temporadas, cuando volví de Tenerife tras mi última salida deportiva de esta Región en el año 2001, al volver al trabajo en el CB Murcia, como Director Deportivo, y recuperar las categorías inferiores del Club, que habían sido borradas de un plumazo, muchos chicos y técnicos hicieron un trasvase deportivo desde el CB Capuchinos al CB Murcia, durante esta última temporada el recorrido ha sido a la inversa.
En aquella ocasión, en la temporada 2001-2002, desembarcamos en el Palacio con un montón de ilusiones un grupo de chicos y entrenadores que esa misma temporada hicieron Campeón en todas las categorías de base al CB Murcia. Marcos Molina entrenaba al equipo júnior con Samuel Alcaraz y Javi Ortuño, ambos de primer año júnior, como referentes, Dani Sánchez llevó al equipo cadete a la fase de Sector del Campeonato de España y Quini García, entrenador del equipo infantil, no solo ganó el campeonato autonómico sino que además clasificó, históricamente, a los infantiles para una Fase Final de un Campeonato de España.
Cuando terminó la temporada pasada, 2004-2005, no pasaba por mi cabeza que todas estas cosas iban a ocurrir, pero todo se precipitó de una manera muy rápida. La entrenadora del equipo júnior del CB Murcia en esa temporada, Maribel Piñar, me llamó al terminar su trabajo en el CB Murcia y me comentó que tras una reunión en el Club, los nuevos dirigentes deportivos en la parcela de las categorías de base habían decidido no hacer para la temporada 2005-2006 dos equipos juniors, asunto programado con anterioridad dada la cantidad y calidad de jugadores que se formaban en el Club, por lo que me llamó para comentármelo y además para decirme que en ese único equipo no iban a contar con Juanjo, mi hijo, que en la temporada que había recién acabada y siendo de primer año júnior había sido el jugador que más minutos había jugado en el Sector Júnior de Miguel Esteban, entre otros jugadores que iban a ser cortados por su relación personal con mi persona.
Esto lo relato y lo cuento porque se han contado muchas mentiras en torno a este tema y con esto, lo dejo zanjado. A raíz de aquella conversación telefónica decidí hacer una 
reunión con los jugadores juniors que los quedaba una sola temporada en esa categoría, yo los había fichado en el CB Murcia (exactamente igual que a los de primer año, de estos últimos solo vinieron dos a la reunión) y creía que les debía explicar la situación con la que se iban a encontrar, a esta reunión solo faltó un jugador, al que creí en ese momento que no era bueno meterle en este asunto por razones personales directas, su hermano jugaba en el club y su padre también colaboraba directamente con las personas que dirigían el club en ese momento.
reunión con los jugadores juniors que los quedaba una sola temporada en esa categoría, yo los había fichado en el CB Murcia (exactamente igual que a los de primer año, de estos últimos solo vinieron dos a la reunión) y creía que les debía explicar la situación con la que se iban a encontrar, a esta reunión solo faltó un jugador, al que creí en ese momento que no era bueno meterle en este asunto por razones personales directas, su hermano jugaba en el club y su padre también colaboraba directamente con las personas que dirigían el club en ese momento.En aquella reunión, en el Club de Tenis de Murcia, y con la asistencia de dos padres más, a parte mi, les expliqué que con la nueva situación que se presentaba en el CB Murcia, un solo equipo y muchísimos jugadores, yo había decidido embarcarme en un nuevo proyecto al que los invitaba a participar, ese proyecto partía con dos jugadores, Chema Bernabé y Juanjo Coello, con los que no contaban en el CB Murcia, y cualquiera de ellos se podía unir al equipo que en ese momento solo se podía adelantar que iba a jugar en Capuchinos y del que me iba a preocupar personalmente.
De todo aquel grupo de jugadores que yo personalmente había fichado en su día solo dos jugadores decidieron acompañarnos en la aventura, Jose Ballesta y Fran López, al entender que no se obraba con justicia con sus dos compañeros desde infantiles y con los que hasta ese momento siempre habían ganado en todas las competiciones en las que habían participado. En la foto de la izquierda, Juanjo, Fran, Chema y Jose en Alcobendas durante el sector.
El resto decidió quedarse y seguir jugando en el CB Murcia. Esta historia se produjo de esta manera y los dos padres que estaban allí conmigo, uno de ellos su hijo todavía juega en ese club, pueden dar fe de lo que ocurrió.
Posteriormente al iniciar la pretemporada el equipo júnior de Capuchinos con Marcos Molina de entrenador y los jugadores que ya he citado más los que ya estaban en el equipo del Colegio, se incorporaron otros jugadores que venían del CB Murcia, Luis Manresa por ejemplo, con el que no contaban o Alejandro Belando, que después de un año de estudios en Inglaterra había vuelto a Murcia, jugador con el que si contaban pero que no quiso continuar al ver la situación producida con su compañero José F. Cano, otro jugador de primer año que iba a ser cortado en detrimento del algún jugador que no tenía hueco en aquel equipo ni con calzador, José Fulgencio Cano jugó en el júnior B de Capuchinos y el Sector Junior del Campeonato de España con el Junior A.
La temporada terminó y ahí están los resultados, el Campeón júnior de Murcia terminó siendo el CB Capuchinos que representó a Murcia en el Sector del Campeonato de España y eso que los juniors del CB Murcia habían jugado toda la temporada en categoría senior y a priori parecían los favoritos por su potencial físico, luego a la hora de la verdad la experiencia de jugadores como Chema Bernabé, Jose Ballesta, Fran López, y Juanjo Coello, a los que se sumó la calidad de jugadores como Guille de Luna, Alex Belando y Alex Moya, más la aportación indispensable de un jugador en edad cadete, el pívot Marcos Molina, fueron determinantes para ser Campeones en júnior. Yo ya había dicho a unos y a otros quien iba a ser Campeón Junior de Murcia la temporada 2005-2006.
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