Ya lo decía en mi anterior entrada y con motivo del partido de Eslovenia, los partidos duran cuarenta minutos. Macedonia, un equipo justito de efectivos que se hace grande con la dureza de la competición, nos ha tenido contra las cuerdas algo más de 25 minutos y solo la continua aportación del genial Juan Carlos Navarro nos ha permitido llegar al final con una ventaja lo suficientemente amplia para ganarnos esa plaza en la final de Lituania y un puesto seguro en las Olimpiadas de Londres del año que viene.
El inicio no fue como se esperaba y los macedonios jugaban de forma muy inteligente sus posesiones con un pase extra cada vez y a falta de 2 minutos y 20 segundos para finalizar el primer cuarto nos ganaban 17 a 18 tras un triple de Pero Antic y los nuestros tenían a Pau Gasol con dos faltas en el banquillo. En ese tiempo que quedaba se ajustó la defensa un poco más y un parcial de 9 a 0 colocó el 26 a 18 al final de ese primer cuarto donde Serge Ibaka había tomado el relevo de Pau con solvencia y seguridad.
Los cambios defensivos, zonas 2-3 más caja y 1 sobre Juan Carlos Navarro, volvieron a meter a los macedonios en el partido y en poco más de cuatro minutos se volvían a poner por delante, 31 a 32. Desde ese momento hasta llegar al descanso el partido se convirtió en un tira y afloja típico de los partidos de esta Macedonia que exprimía al máximo los errores del equipo de Sergio Scariolo. Predrag Samardziski, un 2,15 con 25 años muy interesante para nuestro baloncesto que juega en la liga turca, nos hacía mucho daño jugando muy cerca del aro. En ese tira y afloja los macedonios se movían como peces en el agua y llegaron al descanso por delante 44 a 45 con una canasta de este nuevo Vlado Ilievski que con 31 años parecía desaparecido de la órbita de la primera línea del baloncesto europeo aunque juegue en el Olimpija de Ljubljana.
En la segunda parte los nuestros leyeron mucho mejor el partido, Juan Carlos Navarro metió la directa y anotó 17 puntos de los 27 que hizo el equipo, destrozando la zona que había dispuesto el entrenador de Macedonia. Pau Gasol y Marc Gasol jugaban por dentro y solo Ibaka disfrutó de unos minutos en el final de un cuarto que ha se había puesto de cara gracias al control de los hombres más importantes de Macedonia. De 50 a 52 para los macedonios se pasó a 71 a 62 con un parcial de 21 a 10 gracias al acierto de una Bomba Navarro enorme en todos los aspectos.
Scariolo, como el entrenador macedonio, apostó por una rotación muy corta con solo 8 jugadores y Felipe Reyes, no se puede decir que jugara, San Emeterio, Sada y Claver se quedaron en el banquillo. Ricky Rubio rotó con Calderón y anotó dos tiros muy cómodos ante la zona que renunciaba llegar a su tiro, Llull era la rotación de los aleros para aprovechar su trabajo defensivo sobre el rapidísimo McCalebb, siendo Serge Ibaka el recambio interior de los hermanos Gasol.
En menos de un minuto la distancia se estiró hasta los 12 puntos, 76 a 64, y ese colchón ya se mantuvo hasta el final gracias al recital de Navarro que terminó con 35 puntos en 36 minutos y una actuación asombrosa sobre el resto de jugadores. Pau Gasol aprovechó esos minutos para sumar rebotes y puntos, 22 y 17, en un partido tremendamente duro para él y para su hermano Marc, 11 puntos y 10 rebotes, por el poco respeto arbitral que demostraron los árbitros con ellos ante la dureza de los interiores de Macedonia. Además de ellos tres, Serge Ibaka jugó muy bien y el resto sumaron intangibles muy importantes.
Al final 92 a 80 para los nuestros, final europea asegurada y billete para los Juegos Olímpicos de Londres 2012 confirmado.
Además de la Macedonia de McCalebb de postre, que nos había causado cierta indigestión y flatulencia con todas esas vitaminas y fibras que contiene durante un buen rato, en nuestro baloncesto hay más cosas, muchas más. Nuestra federación da como fecha límite para ultimar licencias de cara a esta temporada que está punto de empezar para el día 30 de septiembre, con lo que los clubes tienen todavía dos semanas para ir ultimando sus plantillas de cara a cerrar sus equipos.
El trabajo en pista de selecciones de la FBRM, desde cadetes a minibaskets, se retrasará un poco y nos iremos a inicios de octubre para empezar con el mismo. En los dos años anteriores empezamos a principios de este mes de septiembre, con lo que en esta temporada perdemos casi un mes, espero que no nos pase factura.
Junto a ese trabajo de selección de grupos trataremos de ir dándole forma al trabajo de tecnificación por edades y en eso contaremos con la colaboración de la AMEBA que ahora dirige Quini García. No nos podemos despistar con estos temas y dar pasos hacia atrás después de haber estado una par de temporadas intentando mejorar este tema. Espero y deseo que no se quede en intención.
La semana que viene dará comienzo un nuevo curso de entrenadores de Primer Grado en formato básico de enseñanza "on line" con algunas clases presenciales muy importantes, hemos estado toda la semana para cerrar el grupo y al final tenemos 53 inscritos que son muchos, y más teniendo en cuenta que se ha quedado mucha gente con ganas de hacerlo. Si no falla la programación de los cursos, esta misma temporada habrá dos nuevos cursos en este formato, uno en enero y otro en mayo del año próximo, además de uno de 2º Grado para el próximo julio de 2012. Es importante tener más entrenadores en nuestra región, aunque ellos deben valorar en su justa medida que estos cursos significan un sacrificio, más o menos duro, y un trabajo durante el tiempo que dura el mismo.
En breve será el momento de escribir sobre el apasionante tema de lo que nos puede deparar el futuro a nivel de selección nacional absoluta teniendo en cuenta que nuestras armas letales más importantes son nacidos en 1980 y que por tanto este año cumplen 31 años y no van a jugar toda la vida. Para los próximos Juegos Olímpicos de Londres en el 2012 llegarán en una edad perfecta de madurez, pero seguramente puede ser la despedida para algunos de ellos, dependiendo de lo castigados que estén, físicamente y anímicamente hablando. Creo que hablar de lo que viene y lo que hay en otras selecciones viendo lo visto, nos puede dar una imagen muy real de lo que podemos esperar de ellos.
Nadie puede dudar de los éxitos de nuestras selecciones más jóvenes durante cada verano en la última década, eso es más que evidente, el problema es si esos jóvenes que hace unos años eran muy buenos a nivel europeo o mundial han tenido el espacio necesario para crecer y terminar su formación. Mi opinión sobre esto trataré de darla con argumentos firmes y nombres propios.
De uno de esos blogs que sigo y leo con atención, Las horas sitiadas, por su inmejorable mezcla de letras aderezadas con un poco de baloncesto, saco la canción de hoy. Un velero llamado libertad de José Luis Perales, una canción de 1979 y de su disco Tiempo de Otoño. Una balada preciosa que la cantaba muy bien el cantante de Cuenca. Nuestras estrellas de hoy, Pau y Juan Carlos, nacieron al año siguiente, igual no la oyeron nunca, para ellos está dedicada.
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