COACHS

En mi carrera como entrenador de baloncesto los "coachs" americanos han sido, sin ninguna duda, muy importantes en la forma de entender el juego, las relaciones con los jugadores y otros entrenadores, y sobretodo en amar este apasionante deporte de una manera, muchas veces, desenfrenada. Como ya escribí en mi comentario anterior, Bobby Knight, que ya tiene el récord de victorias en la NCAA con 880 victorias, fue mi primera referencia en el basket USA y en la forma tan peculiar de entrenar y dirigir un equipo universitario de primer nivel, como lo era y es Indiana. Hoy como casi todos sabéis tras sus interminables problemas con jugadores y dirigentes desempeña su trabajo en la Texas Tech University, con la que ha superado el record de victorias del legendario Dean Smith (NCU) y con la que sigue haciendo un baloncesto muy físico y muy duro desde una defensa muy agresiva donde la presión al balón y a las líneas de pase le han hecho un especialista reconocido en este tema.

Mi segunda oportunidad con un Entrenador Jefe NCAA fuen en Barcelona, en el verano de 1975 si mal no recuerdo. Yo tenía solo 18 años y empezaba mi andadura como entrenador de baloncesto. Víctor Floreal, Presidente de la Federación Tinerfeña de Baloncesto, me dió una beca para asistir como entrenador oyente a la concentración que realizaba la FEB en Barcelona, en el colegio La Salle Bonanova para ser más exactos, con uno de los entrenadores con más prestigio que había en la NCAA. Lou Carnesseca entrenador de los "redmen" de St John´s. Sin ninguna duda, una experiencia increible en todos los sentidos. Todavía guardo con caríño aquellos apuntes y aquellas notas. Dos años más tarde volví a coincidir con Lou en Tenerife, asistía al Congreso Mundial de Entrenadores de Baloncesto en el Puerto de la Cruz. Hablamos sobre la experiencia de Barcelona y sobre su trabajo en la NCAA y en la ABA, seguramente una de las oportunidades más interesantes que he tenido como entrenador. Sus ideas sobre ataque y los conceptos del juego colectivo me han servido para ir dándole forma a mi idéa del juego libre en transición.

Dos años más tarde, mi curso de entrenador nacional de baloncesto se celebró en Málaga, el formato novedoso ese año para la FEB consisitió en hacer una concentración paralela de jugadores con proyección dirigida por Peter Carril. Pedro Carrillo, como le gustaba que le llamaran en aquella concentración y por respeto a sus antepasados hispanos, nos dió la posibilidad de aprender su forma de trabajar y su forma de respetar a los jugadores. En aquel curso que dirigía Javier Añúa y en el que coincidí con un montón de grandes entrenadores que empezaban, Chema Buceta, Rafa Peiró, Pepe Clavijo, Arturo Montequi, José María Martín Urbano...nos sirvió, no solo para sacar el tan ansiado título, sino para conocer de cerca a un grande del baloncesto NCAA y su famoso ataque Princeton, con el cual todavía da clinics por el mundo y genera más enamorados a este juego. Creo que hoy en día, con más de 70 años, Pete Carril es todavía asistente de los New Jersey Nets.

En el verano de 1978 o 1979 no me acuerdo exactamente, mi club de entonces, el RC Náutico de Tenerife organizó un clinic concentración en la pista de la Avenida de Anaga con nuestros mejores jugadores jóvenes, para ello no escatimó esfuerzos y se trajo a Gary Walters. Gary Walters era alumno de Carril en la universidad de Princeton y en ese momento era el entrenador jefe de la universidad de Dartmouth. Yo era el responsable de cantera del club y me tocó trabajar con él cada día en la pista durante más de 10 días. Una experiencia fantástica para cualquier entrenador. En aquella época, Gary Walters, era el entrenador que más joven había debutado en la NCAA y despuntaba en una universidad pequeña como Dartmouth y además se perfilaba como un entrenador de prestigio. Hoy en día es el Director Atlético de la universidad de Princeton.

Alguna fecha no estará bien pero son cosas de la edad que espero se disculpen. En próximas apariciones hablaré de los entrenadores españoles que mas me han ayudado a crecer en este juego de alguna manera.